Carmelo Pérez se jubila tras 48 años en la profesión y 13 al frente de la dirección de sala de Zalacain, el clásico restaurante de Madrid, recientemente renovado. Es toda una institución en el sector de la hostelería, pues ha pasado por lugares tan importantes como el Hotel Palace, Hotel Ritz o Jockey, entre otros. En Zalacain compartió las labores de sala con José Jiménez Blas, quien se jubiló en 2010. Ahora, en esta tercera etapa de Zalacain, Carmen González, asume la dirección del restaurante, ejecutando el proyecto, buscando los niveles de excepcionalidad que la propiedad exige.
Tras 13 años dirigiendo la sala del emblemático Zalacain, Carmelo Pérez, da por finalizada su etapa como director del que fuera el primer restaurante español en conseguir tres Estrellas Michelín. Considerado uno de los profesionales más importantes del mundo de la hostelería en España, cede su testigo a Carmen González, actual directora de operaciones de Zalacain.
Hasta ahora, Carmen González, ha sido la responsable de ejecutar el proyecto buscando los niveles de excepcionalidad que Zalacain exige. Se ha encargado de dirigir a los equipos, sacar lo mejor de cada uno, medir milimétricamente los detalles y conseguir que la experiencia del cliente en Zalacaín sea inolvidable.
Ahora, es ella la responsable de dirigir la sala y de ser la cara visible de este restaurante que, tras cuatro meses de obras, comenzó su tercera etapa el 2 de octubre de 2017.
Carmelo Pérez recibió en 1983 el galardón concedido por la Real Academia de Gastronomía al Mejor Director de Sala, en los Premios Nacionales de Gastronomía; en 2005 el reconocimiento al Mejor Director de Sala en los Premios a la Excelencia Turística Gastronómica; en 2015 fue premiado por la Federación de Profesionales de Sala; en 2017 le nombraron Mejor Maître en los Premios Club Gourmet; entre otros
muchos.
Zalacain, lugar concebido para el encuentro y acuerdo en el mundo empresarial y político, ya ha cumplido 45 años de historia. En esta tercera etapa se presenta ante sus clientes en un perfecto equilibrio entre lo tradicional y lo actual, entre la cocina y la sala, entre la experiencia de su equipo de siempre y el empuje de sus nuevas incorporaciones. Entre ellas también destaca el papel de Julio Miralles, Executive Chef, que ha conseguido preservar los sabores de siempre, la cocina de calidad y las buenas bases, aportando a los platos más clásicos de Zalacain, luz actual.