En la Rioja Oriental se encuentra una bodega muy especial capaz de contar fascinantes historias a través de sus vinos. Es Viñedos de Alfaro, que cuenta con la experiencia y excelencia del Grupo El Gaitero (propietario de la bodega) y con una filosofía claramente definida: crear vinos elaborados solo con uvas propias, siempre con las mismas variedades y obtenidas del mismo terreno. Esto da lugar a unos vinos únicos y constantes, con personalidad propia, que reflejan el terroir de los viñedos y de la zona.
Texto: Ángela Butcher. Fotos: Viñedos de Alfaro
En Viñedos de Alfaro ni compran uva de otras producciones ni compran vino, solo utilizan uva propia, un elemento diferenciador que les permite controlar todo el proceso desde la viña hasta la botella y seleccionar las mejores calidades, así como implantar en el viñedo prácticas sostenibles y respetuosas con el medioambiente a través de una política de mínima intervención.
Historia y viñedos
Viñedos de Alfaro comienza su andadura en 1974 teniendo como objetivo agrícola la producción de uva para vinificación de alta calidad. En el año 2005 dan el gran paso: realizar la totalidad del proceso, desde el cultivo de las uvas hasta la elaboración y embotellado. Las 97 hectáreas de viñedo se sitúan entre los municipios de Alfaro y Aldeanueva, a los pies de la Sierra de Yerga, justo en el punto en el que se fusionan la influencia atlántica y la mediterránea.
Los terrenos, configurados en forma alomada, se dividen en cinco parcelas que presentan características y variedades de diferentes uvas:
- Cantera Buey (recientemente ha recibido la catalogación de Viñedo Singular por el Consejo Regulador) y Los Señores son las que albergan las viñas más antiguas –datan de 1975- y producen Garnacha de máxima calidad.
- Las Planas, plantada en 1980, se centra en uva blanca de variedad Viura.
- La Lobera, cuyas viñas datan de 1993, está destinada a una gran variedad de uvas: Mazuelo, Tempranillo, Garnacha y Viura.
- Rodiles está dedicada en exclusiva a producir la variedad Graciano.
Aunque se utilizan casi todas las variedades autorizadas por el Consejo Regulador DOC Rioja, hay dos de ellas que merecen muy especiales: Garnacha y Graciano.
La Garnacha es la variedad de moda y está adaptada a la perfección a las parcelas que la producen. Es la uva que predomina en los vinos tintos jóvenes y crianza y también en el rosado, creando con su presencia vinos afrutados, golosos y frescos.
Por su parte, la Graciano es una variedad escasa en Rioja y difícil de cultivar por sus bajos rendimientos. La parcela Rodiles, donde ocupa una extensión de seis hectáreas, se encuentra entre las mejores fincas de toda la región dedicadas a esta uva. Los vinos a los que da lugar son estructurados, especiados y balsámicos.
Dos líneas de vinos
Viñedos de Alfaro da vida a dos líneas de vinos, la de los clásicos y la de los de autor.
Los clásicos responden a la producción de vinos jóvenes (tanto blanco como tinto y rosado), crianza y reserva. Y lo hace bajo la marcas de Real Agrado y Conde del Real Agrado. Son vinos frescos y equilibrados, con una buena presencia de fruta y que, a medida que se introducen crianzas en barrica (ya sea para crianza o reserva), van ganando complejidad. A esta familia pertenece la última referencia creada por la bodega: Va!, un vino moderno, de maceración carbónica, pensado para un consumidor joven y con ganas de probar un Rioja diferente.
Los vinos de autor son producciones exclusivas y muy limitadas que reflejan lo mejor de las fincas de Viñedos de Alfaro. En este apartado se encuentran Rodiles Blanco Reserva, Rodiles y Rodiles Graciano.
Cosechando éxitos
Su esmerado trabajo, su privilegiada ubicación y su impecable forma de cuidar las cepas dan lugar a unos excelentes vinos que no han pasado desapercibidos en los más prestigiosos certámenes internacionales.
Ejemplo de ello es, sin duda, uno de los reconocimientos más importantes recibidos y que recayó sobre el Rodiles Blanco Reserva 2018. Este excepcional vino fue elegido por Decanter (la publicación de vinos de referencia en Reino Unido y, por ende, del mundo) como Mejor Vino Blanco de la DOC Rioja, con 97 puntos.
Otros premios destacables son la Gran Medalla de Oro para su Rodiles Reserva 2007 y la Medalla de Oro para su Conde del Real Agrado Crianza 2015, ambos obtenidos en el Concours Mondial de Bruxelles 2018. Esto es solo la punta del iceberg porque sus vinos han sido reconocidos en diferentes ocasiones y a lo largo y ancho del mundo, de Alemania a Córdoba pasando por Inglaterra o Canadá.