La ‘Mesa para uno’ -la mesa en la que todos caben-, pensada para rodearse de otros amantes de la gastronomía que no siempre encuentran acompañante para salir… Se acabó el quedarse en casa con ganas de un homenaje de altura, por los menos, el próximo jueves 27 de abril a las 21:30h. Otra alternativa que ofrece este restaurante madrileño del barrio de Embajadores son las catas privadas, que Raúl García, el sumiller, diseña a medida.
En Uskar (Alonso del Barco, 11. Madrid. Tel. 91 139 68 63. https://restauranteuskar.com) son unos enamorados del vino, y su carta líquida invita a viajar por España a través de clásicas como la Garnacha, de escasas como la Espadeiro o desconocidas como la Crujidera, y recoge también curiosidades de Francia, Alemania, Austria, Turquía, Bulgaria y Japón. Más de 140 variedades que a partir de ahora, además de con sus catas-maridadas, puede descubrirse a través de dos divertidos encuentros.
‘Mesa para uno, la mesa en la que cabemos todos’: comida, bebida y compañía
Ya no hace falta convencer al amigo de turno para salir a cenar un día entre semana, porque en Uskar han montado esta gran mesa, que es para ir solo, pero en realidad es para rodearse de otros amantes de la buena gastronomía que no siempre encuentran acompañante… Así que, se acabó el quedarse en casa por no tener con quién, porque el plan ya lo tenemos, al menos, el último jueves de abril. Cada uno llama, reserva su sitio -o dos- y comparte mesa, por supuesto, en torno a una deliciosa comida y con un maridaje de 10. José Miguel Valdivieso preparará un menú degustación 100% de mercado y Raúl García se encargará de armonizarlo. Un total de 4 pasos -entrante, pescado, carne y postre- y 4 copas de vino -con algún champagne incluido- por 50 € (se puede pedir sin maridaje por 35 €). El disfrute del paladar está garantizado y seguro que la diversión también. La primera ‘Mesa para uno’ será el jueves 27 de abril a las 21:30 h y el aforo es limitado, solo hay 20 plazas.
Catas privadas
Estas ya más al uso, pero nuevas en Uskar, están llamadas a ser uno de los nuevos atractivos de este inesperado bar restaurante de Embajadores. Las han pensado para grupos que sienten curiosidad sobre una determinada zona vinícola o quieren conocer unas uvas concretas, -de esas tan especiales que atesora Raúl, que se decanta por las variedades nacionales más desconocidas, pero también cuentan con vinos de Francia, Alemania, Austria, Turquía, Bulgaria y Japón- y él diseña la cata adaptándose a las prioridades y presupuesto del cliente. Para acompañar cada copa, la propuesta sólida de José Miguel Valdivieso, que conquista con una carta fina, cuidada, que enamora, ¡y siempre con productazo! Pueden ser recetas que suenan tan bien como: Sardinas en mojo verde, Tortilla vaga de criadilla de tierra con sashimi de ventresca de atún, Berenjenas chinas con salsa picante, Arroz de pulpo, alcachofas y ajetes, Taco de aguja de cerdo ibérico a la brasa con ajo, patata y mayonesa de chile chipotle. Y siempre con un dulce final…
