Dos incunables se incorporan junto a los 67 fondos documentales que conforman la muestra «Exposición Vivanco. Pensando en vino. 40 años de coleccionismo», entre ellos documentos inéditos de Pasteur, Gutenberg, Neruda, Cartier-Bresson o Alphonse Mucha. Se trata de Epigrama, del poeta latino Marco Valerio Marcial, que destacó por su ingenio satírico y su análisis penetrante de la sociedad de su tiempo. Impreso en Venecia en 1482, nos brinda detalles muy interesantes sobre los diferentes vinos y la forma en que lo bebían en la antigüedad. El segundo volumen que se suma a la muestra fue impreso en Augsburgo (Alemania), en 1482: una rarísima primera edición, en alemán, de Regimen sanitatis (en la imagen), cuya autoría se atribuye al español Arnaldo de Vilanova (1238-1314), reconocido como un sabio en su época. Al que fuera médico del Rey Pedro III de Aragón y del Papa Clemente V, le debemos el conocimiento en Occidente de las propiedades médicas del alcohol, o espíritu del vino, y de que se popularizara como “Eau de vie”, o elixir de la vida.
El apasionante viaje de seis siglos a través del vino en diferentes soportes documentales que nos ofrece la «Exposición Vivanco, Pensando en Vino: 40 años de coleccionismo», incorpora dos valiosos y atípicos incunables, ambos impresos en 1482, que se suman a los ya expuestos De re rustica y De conservatione sanitatis. Hasta la clausura de la muestra, el próximo 23 de abril 2017, compartirán espacio, para que el visitante profundice en la curiosa vinculación del vino, junto a diversos soportes como manuscritos originales de Louis Pasteur o de Pablo Neruda (entre otros, su versión primigenia Oda al Vino), fotografías de Cartier-Bresson, carteles publicitarios (de Alphonse Mucha y diferentes ilustradores), ex libris, matasellos, postales, fondos de barrica y diversos documentos, también sonoros.
La visión del vino a través de dos joyas bibliográficas del siglo XV
El Centro de Documentación del Vino Vivanco alberga 9 incunables, es decir, libros impresos con tipos móviles desde la aparición de la imprenta de Gutenberg, en 1453, hasta el año 1500 inclusive. A De conservatione sanitatis, que aún conserva su encuadernación original; o De re rustica de Columella, de 1499, expuestos en la muestra Vivanco Pensando en Vino: 40 años de Coleccionismo desde su inauguración el 29 de abril de 2016, se suman ahora dos incunables de gran valor bibliográfico y de sumo interés testimonial sobre el vino.
Epigrama. Domitii Calderini Veronensis Commentarii in Valerium Martialem as Clarissimum Cirum Laurentium Medicem Florentinum Petri Medicis, del poeta latino Marco Valerio Marcial (40-104 dC), fue editado en Venecia en 1482. Se trata de una edición de Ioanne Mocenico Duce Foeliciter Vivente. Sobre su autor, poeta latino nacido en la ciudad romana de Bílbilis (actual Calatayud), cabe destacar su fama, que radica en su ingenio satírico, su concisión a la hora de escribir y su dominio del género literario epigrama, en el que no tuvo rival al parecer, y en el que supo documentar a la sociedad romana de la época. Fue un observador penetrante de la sociedad de su tiempo, y su obra oscila entre la más pura lírica y la obscenidad más abyecta. Este Epigrama nos brinda detalles muy interesantes sobre los diferentes vinos y la forma en que lo tomaban en la antigüedad. Marcial, además, era un fanático del vino Falerno de Italia, que guardaba celosamente durante largos años en botellas de cristal.
El segundo incunable que se ha incorporado a la exposición es una atípica primera edición en alemán del Regimen sanitatis (en alemán Die Ordnung der Gesundheit), edición atribuida a Arnaldo de Vilanova (1238-1314) e impresa en Augsburgo (Alemania) en 1482. A este médico, teólogo y embajador, considerado un sabio de su tiempo, le debemos obras claves de la medicina europea medieval, la introducción del alcohol o espíritu del vino en la “Materia Médica” y la popularización del “Eau de vie” del vino, que llamó el elixir de la vida. Denominado el médico de reyes y papas (entre ellos el Rey Pedro III de Aragón, el Rey Alfonso III de Aragón o el Papa Clemente V), fue fiel discípulo de los escritos clásicos de Hipócrates y Galeno.
Su nombre también ha pasado a la posteridad junto a la célebre Escuela de Salerno, a la que pertenecían un grupo de doctores que divulgaron los escritos de los antiguos médicos griegos. En realidad se trataba de consejos en forma de aforismos para mantenerse sano. Precisamente, para no caer enfermo y curarse de toda suerte de males, importaba conocer los nombres y las virtudes de los diferentes vinos, cuándo y cómo beberlos. Las ediciones más antiguas de la Escuela de Salerno son aquéllas en las cuales Arnaldo de Vilanova fue el autor, o por lo menos el editor.
Sobre la exposición Vivanco, Pensando en Vino: 40 años de Coleccionismo
Esta muestra supone un recorrido memorable a través de la Cultura del Vino y sus 8000 años de historia, con una selección de los fondos del Centro de Documentación del Vino de la Fundación Vivanco. El apasionante viaje de esta bebida milenaria y su cultura, gracias a documentos escritos, sonoros y manuscritos, podrá visitarse hasta el 23 de abril de 2017.
El vino, más allá de las diversas disciplinas artísticas, ha viajado en forma de libros, postales, sellos, monedas, minutas, fotografías, telegramas, cartas de embarque, poemas e incluso descubrimientos decisivos para la humanidad. La exposición inicia este camino documental en el siglo XV, gracias a diversos incunables. El gran Louis Pasteur, padre de la microbiología, también está presente en esta muestra. A él le debemos alguno de los avances científicos más relevantes de la historia, como la vacunación como método preventivo de enfermedades infecciosas, y la pasterización, un hecho crucial para convertir el mosto en vino. Su carta manuscrita comparte escenario en la Sala de Exposiciones Temporales del Museo Vivanco de la Cultura del Vino junto con el poeta del amor, y también del vino, Pablo Neruda. Su versión primigenia Oda al Vino y sus dedicatorias en Odas Elementales, nos aproximan al autor a través de sus manos y su pensamiento.
Completan la exposición la Colección Contratos de Transporte de Mercancías; el Fondo Larrea, director de la Estación Enológica y presidente del Consejo Regulador de Origen Rioja (1944-1971); carteles publicitarios (entre ellos los de Alphonse Mucha, datados en el siglo XIX); minutas, entre ellas las de la cena de la botadura del Titanic; o fotografías de Ouka Leele, Carlos Cánovas, Stéphane Richter y de Hanry Cartier-Bresson, el padre del fotoperiodismo.