La Denominación de Origen Rueda concluye la vendimia con un total de 130.480.225 kilos de uva con derecho a ser acogidos. Las condiciones climáticas, con mucho calor en agosto y precipitaciones intensas a principios de septiembre, han permitido la correcta maduración del fruto, que se presenta en óptimas condiciones sanitarias. El perfecto equilibrio entre grado y acidez de la uva cosechada augura un gran potencial para los vinos de la añada 2023.
Ha sido una vendimia menos abundante y más temprana que en 2022 en la DO. Rueda. El 15 de agosto se comenzaba con la variedad Sauvignon Blanc, cuatro días más tarde con la Chardonnay (ambas cuentan con un ciclo de maduración más corto) y una semana después con la uva Verdejo, la variedad autóctona de la zona. En todas las variedades ha sido mayoritaria la vendimia nocturna y a máquina, una técnica que marca la cosecha en esta DO y que permite conservar la uva en perfectas condiciones organolépticas, manteniendo su grado de acidez y evitando la oxidación.
“Las precipitaciones han sido más abundantes que en un año normal y el pedrisco o las heladas de junio han provocado la reducción de rendimientos en zonas aisladas”, asegura Santiago Mora, director general de la DO Rueda “Aun así, el volumen de vendimia ha sido suficiente y, sobre todo, la uva obtenida presenta unas condiciones de calidad excelentes, con un buen equilibrio entre grado y acidez y sin problemas de hongos o humedades”.
La Verdejo supone el 88,4 por 100 de la producción de uvas blancas
En total, la Denominación de Origen Rueda ha finalizado la vendimia con 130.480.225 kilos de uva con derecho a ser acogidos; es decir, con derecho a llevar la contraetiqueta que certifica que es un vino de la DO. Rueda. De ellos, 130.164.156 corresponden a uvas blancas. La variedad autóctona Verdejo supone el 88,4% de la producción total de uvas blancas, con 115.373.284 kilos.