Una mayor concienciación sobre la alimentación, la apuesta por referencias más saludables o la creación de dietas más variadas son algunas de las preferencias en consumo para este nuevo año. Mowi, compañía líder en la cría de salmón, nos desvela las tendencias alimentarias de 2024.
Este nuevo año viene pisando fuerte en lo que a tendencias de alimentación se refiere. Ya no hay una línea única, sino que los conceptos se ramifican y afectan tanto a los productos, como al cocinado o la experiencia de consumo. Principalmente, destacan cuatro tendencias que son las que marcarán el rumbo del sector en los próximos meses:
1. En primer lugar, observamos que hay una mayor profesionalización de la comida hecha en casa. Cada vez es más común que los consumidores busquen darle una vuelta a los platos que cocinan, especialmente durante las veladas en las que hay invitados. Esto se traduce tanto en el empleo de utensilios de cocina más especializados -o que permitan acabados más elaborados-, así como en el aumento de la aparición de productos gourmet o de calidad superior en las cestas.
2. En segunda posición se encuentra el ahorro con mantenimiento de la calidad. Nos encontramos en un momento inflacionista donde el usuario medio busca cómo reducir el gasto sin renunciar a la calidad o el sabor en lo que a la comida se refiere. Esta medida pasa por la optimización de la compra y consiste en reducir las veces que se acude al supermercado y aprovechar los recursos tanto de tiempo como de productos..
3. En el tercer puesto del ranking de tendencias se encuentra el perfil de quien hace la compra. Un consumidor concienciado con la procedencia de los alimentos que consume, y cada vez más preocupado por la sostenibilidad, llena la cesta de la compra con más cuidado, atento a factores que serán determinantes en la selección del producto o en que se decida por uno u otro. En el caso de los frescos, buscamos que cumplan ciertos estándares como certificados de cuidado animal, utilización de los recursos de forma sostenible, etc,
4. Por último, destaca la consolidación de la alimentación saludable en dietas variadas. Aunque la idea del ejercicio físico como fundamento para llevar una vida sana sigue siendo un pilar básico, la concienciación sobre la salud mental y la necesidad de apostar por una alimentación nutritiva y equilibrada gana cada vez más fuerza. Esta apuesta por la alimentación de calidad, en la que prima un mayor cuidado en la selección de los alimentos, así como en su preparación, hace que el consumidor se decante más por aquellos productos que tengan un alto nivel nutricional, propiedades determinadas o sean identificados como súper alimentos.