Es el sexto exponente del proyecto de recuperación de variedades ancestrales que puso en marcha la bodega familiar hace 40 años y el primero que proviene de la finca Purgatori, en Les Garrigues. En la imagen, racimo de Gonfaus.
Familia Torres presenta Gonfaus 2021 (47 euros), el nuevo exponente del proyecto de recuperación de variedades ancestrales, que inició la bodega familiar hace cuarenta años para conocer el patrimonio vitícola de Catalunya de antes de la llegada de la filoxera y con el que hoy puede adaptarse al cambio climático. Es un vino experimental de producción muy limitada, elaborado íntegramente con la variedad negra del mismo nombre procedente de la finca Purgatori, en Les Garrigues (Costers del Segre).
Localizada hace más de 20 años y una vez saneada y reproducida in vitro, se ensayó en el campo en diferentes fincas de Familia Torres para conocer qué condiciones de clima y suelo le eran más favorables y poder valorar su potencial enológico. Con los años se ha constatado que es en la finca Purgatori, a unos 500 metros de altura, donde se expresa mejor ya que se ha adaptado muy bien al clima extremadamente seco y las oscilaciones térmicas de zona. La Gonfaus es poco productiva y una de las pocas variedades femeninas conocidas actualmente –la mayoría son hermafroditas.
La madre de la Querol
Un estudio realizado por el ampelógrafo francés Thierry Lacombe sobre las relaciones de parentesco de las variedades de uva demuestra que la Gonfaus es una variedad muy antigua ya que es madre de la Querol, una de las primeras variedades recuperadas por Familia Torres, y parienta de muchas otras variedades como la también ancestral Pirene, la Trobat o la Graciano. Los vinos de Gonfaus presentan aromas intensos y complejos de frutas maduras sobre un fondo ligeramente especiado y muestran una acidez bien integrada y buena concentración, con taninos dulces y maduros. Esta acidez es, de hecho, un denominador común en las variedades ancestrales recuperadas en las que se está focalizando Familia Torres.
Son variedades, en general, de ciclo largo, con maduraciones progresivas y que preservan muy bien la acidez. Gonfaus 2021 es la primera añada comercial de este vino, destinada especialmente ala alta restauración, y de la que se han producido únicamente 1.118 botellas. El vino lo elabora en la bodega Purgatori el enólogo David Barriche, en un proceso delicado para preservar la esencia de la variedad y enaltecer su elegancia e intensidad aromática. 2021 fue una buena añada para la finca Purgatori por las temperaturas moderadas, a pesar del clima continental extremo de la zona, y la buena reserva hídrica de la viña.
Vinos singulares
El año comenzó con una gran nevada de hasta setenta centímetros de nieve acumulada en la parte alta de la finca, donde se encuentran las cepas de Gonfaus, lo que propició un buen desarrollo vegetativo de la viña. A pesar de empezar como un proyecto de carácter filantrópico, ya hace años que la quinta generación, representada por Miguel y Mireia Torres Maczassek, se ha centrado en recuperar las variedades con más potencial enológico y mejor adaptadas a las altas temperaturas y la sequía con el objetivo de crear vinos singulares que puedan llegar a los consumidores. Para Miguel Torres, «recuperar poco a poco el patrimonio y riqueza vitícola de Catalunya es muy emocionante pero lo hacemos con la mirada puesta en el futuro para elaborar vinos que no sólo hablen de nuestra historia sino que mantengan la calidad y la acidez a pesar del cambio climático».
El sexto vino ancestral
Gonfaus es el sexto vino de Familia Torres elaborado con variedades ancestrales recuperadas, el tercer monovarietal y el primero que proviene de la finca Purgatori (a partir de la añada 2022, estará amparado bajo la DO Costers del Segre). Sus predecesores son Grans Muralles (DO Conca de Barberà), que integra en el cupaje de variedades autóctonas el Garró y la Querol, las dos primeras variedades recuperadas por la bodega; Clos Ancestral (DO Penedès), elaborado con la ancestral Moneu procedente del Castell de la Bleda, junto con Tempranillo y Garnacha, Forcada y Clos Ancestral blanco (DO Penedès), elaborados con la única variedad blanca recuperada, Forcada, como monovarietal y como parte de un cupaje con Xarel·lo respectivamente ,y Pirene, elaborado 100% con la variedad negra ancestral que da nombre al vino, plantada en el Prepirineo.