La Guisandera de Piñera –Rosario Pino, 12, la embajada de la cocina asturiana en Madrid– es, en los días más fríos del año, el lugar perfecto para disfrutar de guisos y platos de cuchara. Sus propuestas más invernales, como la Fabada de la imagen, se pueden disfrutar, además de en su sala, también a domicilio con su servicio de delivery.
En los días más fríos, los platos de cuchara se vuelven los grandes protagonistas de la temporada, ofreciendo calidez y confort en cada bocado. Es en estos momentos cuando La Guisandera de Piñera, la embajada de la cocina asturiana en pleno corazón de Madrid, se presenta como el lugar ideal para disfrutar de la tradición culinaria de Asturias. Este restaurante no solo invita a degustar sus exquisitos guisos y especialidades en su acogedora sala, sino que también brinda la posibilidad de llevar esa experiencia única a casa. Gracias a su servicio de delivery, que cuenta con un amplio radio de entrega, los clientes pueden disfrutar de la auténtica cocina asturiana desde la comodidad de su hogar, sin renunciar a la calidad y el sabor que caracteriza a cada uno de sus platos.
Así, tanto en el cálido ambiente del restaurante como en casa, la propuesta de La Guisandera de Piñera se convierte en un refugio gastronómico perfecto para los meses más fríos, ofreciendo una carta rica en recetas tradicionales que evocan el alma del norte de España.
Tratándose de un restaurante que homenajea a la cocina asturiana, la Fabada es el plato tradicional de esta región que cuenta con más seguidores en todo el mundo. En La Guisandera de Piñera la elaboran con productos llegados desde la tierra de la Guisandera, como son las fabas de la I.G.P. Faba Asturiana y el compango –el chorizo y la morcilla– desde Cangas del Narcea.
Con la fabada, al igual que con el resto de la propuesta de su carta, los hermanos Manuel y Tino Marrón y la hija de este último, María José, rinden homenaje a su madre y abuela, respectivamente. Todo el concepto de La Guisandera de Piñera tiene como objetivo ensalzar las elaboraciones pausadas, de toda la vida, y que dan como resultado una cocina sabrosa, herencia de la que hacían las guisanderas asturianas. Hablamos de esas mujeres que, además de cocinar, se han encargado a lo largo de los años de conservar el recetario asturiano tradicional, una labor fundamental para entender la gastronomía del Principado de Asturias en la actualidad. Así, la propuesta que ofrece La Guisandera de Piñera tiene un corte tradicional, aunque con algunas actualizaciones.
Este restaurante, un homenaje a la mujer y a la cocina asturiana, además de la Fabada Asturiana, ofrece otros platos de cuchara como son sus Verdinas estofadas con marisco y los Callos a la asturiana de Pedro Martino. Todos ellos están disponibles tanto en su sala como en formato delivery a través de Glovo.
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