Es innegable que el cocido es acaso el principal reclamo de la gastronomía madrileña. En La Rayua (segunda marca de la familia Verdasco, propietarios también en Madrid de la Taberna La Bola) mantienen la receta de la matriarca de la familia y elaboran el cocido tal y como ella lo hacía hace más de 150 años. Es decir, elaborado de manera individual, en puchero de barro, con cocción lenta sobre carbón de encina.
No obstante, este no es la única manera de comer cocido. En La Rayua (con dos sedes en La Latina y en la calle Luna) han decidido también innovar y ofrecer diferentes alternativas para disfrutar del sabor del cocido.
Por ejemplo, en su carta cuentan con una pizza de ropa vieja, elaborada con salsa tomate casera, la carne del cocido desmigada y unos garbanzos fritos por encima. También se puede comer un rico arroz madrileño, que se elabora con el caldo, la carne y los garbanzos del cocido.
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