Exhibe elementos cercanos y una cocina que destaca por su sinceridad, simplicidad y el cuidadoso manejo de los productos locales, además de una amplia selección de los vinos de la histórica y prestigiosa bodega lanzaroteña.
El Grifo, la bodega más antigua de Canarias y una de las diez de España que el próximo 2025 celebra su 250º aniversario, inaugura su nuevo Wine Bar, el destino para los amantes del vino y de la gastronomía local de la isla. La bodega, fundada en 1775, trabaja por mantener un trato cercano con sus clientes y visitantes, sin descuidar la atención meticulosa a los detalles. Por ello, el nuevo Wine Bar nace con el objetivo de ofrecer una experiencia auténtica que celebre la riqueza de los productos locales y la excelencia de sus referencias vinícolas.
Un nuevo concepto de cata en la bodega
El Wine Bar de El Grifo invita a sumergirse en una experiencia vinícola única, ya sea en su terraza o en el interior, y degustar una amplia selección de los vinos más icónicos de la bodega, los imprescindibles convertidos ya en clásicos, así como los más audaces fruto de la apuesta por la investigación.
Desde espumosos como Brut Nature Reserva Malvasía volcánica y el Ancestral Blanco Ecológico, a blancos como el Semidulce colección, Lías o Finca Ramón Ecológico, sin olvidar, tintos como Grano a Grano o su único coupage, Ariana, y, por supuesto, el Rosado de Lágrima, o el Orange Wine. Por copas, solos o acompañados por diferentes propuestas culinarias. Destacan las tablas de aperitivos con batatitos gourmet de cultivo local en Jable y de quesos –una selección de 5 quesos de Canarias y confitura local de guayaba- ideal para maridar con El Grifo Semidulce Colección.
También, muy propio de la isla: chicharrones de cochino sazonados con gofio de ‘La Molina’; mojama de atún de Lanzarote con aceite de oliva virgen D.O. Lanzarote y almendra; tostada de chorizo de teror –típico de las Islas Canarias-, tomate y ventresca de atún así como salmón ahumado de Uga acompañado de pan de masa madre local y mantequilla.
‘El viñedo de lo imposible’
El nuevo Wine Bar es el broche perfecto cuando se realiza una de las visitas enmarcadas en la oferta de enoturismo de El Grifo. Se trata de cuidadas experiencias para conocer la historia y el legado del llamado ‘viñedo de lo imposible’. Entre ellas, El Grifo Wine Lovers, un recorrido de 120 minutos para disfrutar de una cata de 4 vinos bajo un chaboco centenario, pasear por los viñedos, descubrir el fascinante hotel de insectos de la bodega, o visitar en exclusiva la casa y biblioteca familiar o Viaje al mundo de El Grifo, una visita guiada por los paisajes singulares y los viñedos que termina con la cata de 3 vinos referentes de la bodega.
demás y dado su compromiso con la innovación, el territorio y la viticultura regenerativa que respeta el entorno y ayuda a combatir el cambio climático, El Grifo ofrece una experiencia enoturística 360º para aquellos que deseen ser partícipes de su historia, legado y maestría.