El concurso Chef Sierra de Cádiz incluye un apartado específico con el ovino y caprino como protagonistas. Gracias al apoyo de Interovic, como interprofesional encargada de estos productos en España. El potencial que tienen estas carnes para una gastronomía que aúna excelencia organoléptica con sostenibilidad en una clase magistral de Miguel Ángel de la Cruz (en la imagen).
La edición de este año del concurso Chef Sierra de Cádiz ha puesto a los aspirantes a prueba con las carnes de lechal, cordero y cabrito. Se trata de una de las grandes citas del panorama culinario del sur de España. Una de sus señas de identidad es la puesta en valor de los productos agroalimentarios de la región, así como de las técnicas y recetas tradicionales que abundan en la serranía gaditana.
Todos los chefs que lo deseen pueden presentar su candidatura al concurso. El jurado del certamen es el encargado de realizar la primera criba entre todos los inscritos. Tras este análisis, quedará configurado el grupo de aspirantes que hayan pasado a la segunda fase. En ella, los que hayan resultado clasificados deben realizar, en vivo y en directo, sus creaciones.
Apuesta por la tradición y la alacena de proximidad
En esta fase, los representantes de las cocinas de Cádiz que hayan recibido la oportunidad de defender su candidatura en la segunda vuelta tendrán que mostrar al Jurado cuál es su propuesta para realizar alta gastronomía con la carne de cordero. Una de las acciones a valorar será trabajar con los cortes menos habituales en la hostelería, la restauración y el catering. Piezas que encierran un gran potencial de aromas y sabores para el que es necesario disponer de la técnica y el conocimiento necesarios para poderlos desplegar. Entre estas alternativas se encuentran los filetes de pierna, los turnedós, el cuello, los churrasquitos o las chuletillas, entre otros.
Tanto los cortes más innovadores como los más tradicionales tienen en común su producción artesana y respetuosa con el medio ambiente. Nuestras carnes de lechal, cordero y cabrito se crían bajo los más altos estándares de calidad y seguridad alimentarias. Gracias a ello, son unos aliados de excepción para la gastronomía que busca lo mejor para sus clientes, tanto en el plano organoléptico como medioambiental y social.
Miguel Ángel de la Cruz y las posibilidades del ovino y caprino
Los profesionales que asisten al concurso Chef Sierra de Cádiz tienen la oportunidad de mejorar sus conocimientos sobre las carnes de lechal, cordero y cabrito de la mano de un cocinero de referencia como es Miguel Ángel de la Cruz. Este chef, con una estrella Michelin por su restaurante La Botica de Matapozuelos, en Valladolid, dispone de una dilatada experiencia en la investigación y desarrollo de aplicaciones gastronómicas para estas carnes.
Gracias a sus conocimientos, las figuras de la hostelería de la región gaditana gozan de la oportunidad de conocer un producto cercano y sostenible con uno de los máximos exponentes en esta disciplina. La oferta que el sector pone a disposición del ámbito Horeca se ha visto diversificada y ampliada gracias a formatos actualizados y adaptadas a las demandas de los consumidores del siglo XXI. Cortes con unos tiempos de cocinar rápido, un moderado contenido de grasa y fáciles de encajar. Además de las presentaciones más tradicionales, el ámbito productor ha planteado una diversificación para cubrir la demanda actual, tanto en las cocinas domésticas como en las profesionales, de nuevas posibilidades de consumo que se adapten al espacio y tiempo disponible.
A lo largo de su masterclass, los asistentes tuvieron la oportunidad de ser testigos de una presentación teórica a las carnes de ovino y caprino, seguida de la elaboración de diversas recetas en las que se han planteado las posibilidades gastronómicas de estos productos. Un potencial al alcance de los cocineros que buscan consolidar una oferta de calidad organoléptica, en la que los beneficios medioambientales y sociales estén también reflejados.