Cada viernes y sábado hasta el 31 de agosto, el Museo Reina Sofía proyectará una selección de películas, tanto nacionales como internacionales, en un cine al aire libre. Este ciclo engloba nueve programas temáticos que recorren las últimas décadas de la historia el cine. El Jardín de Arzábal, con su cocina de mercado con el sello de Iván Morales y Álvaro Castellanos y su propuesta de coctelería de inspiración internacional, se convierte en el escenario perfecto para completar la experiencia y comenzar la velada.
Un año más, el Edificio Sabatini, situado en la Calle de Santa Isabel número 52 de Madrid, se convierte en un templo para la difusión del séptimo arte gracias al Museo Reina Sofía que celebra un nuevo ciclo de cine al aire libre. Como broche, El Jardín de Arzábal, situado en el propio edificio, se convierte en el complemento perfecto a la experiencia, haciendo de la combinación de cine y gastronomía un plan imperdible e infalible esta temporada.
El cine piensa el cine
Hasta el 31 de agosto, a las 22:00h, el icónico jardín del Edificio Sabatini abre sus puertas para dar paso a unas jornadas cinematográficas bajo el cielo estrellado de la capital con acceso gratuito. Bajo la premisa ‘El cine piensa el cine’, cuya inspiración viene dada por diferentes bloques temáticos que giran en torno a materias transversales y populares como pueden ser La vida del artista o Actrices en construcción, este 2024 las jornadas incluyen cintas que recorren las últimas décadas, apostando por obras tanto en versión original como en castellano, contemporáneas y a color o, para los más clásicos, en blanco y negro e incluso algunas muestras de cine mudo. Además, algunas, como Las cosas indefinidas, vienen acompañadas de una presentación en vídeo de la directora, María Aparicio.
Cocina de mercado con toques viajeros
Con una ubicación incomparable en el propio edificio, El Jardín de Arzábal se presenta como la opción perfecta para disfrutar de la gastronomía en un ambiente relajado y alejado del bullicio de la capital antes de estas sesiones de cine. Iván Morales y Álvaro Castellanos son los artífices de una propuesta que gira en torno a la cocina de mercado de corte tradicional con toques internacionales y viajeros y en la que se pueden encontrar platos como las patatas bravas al más estilo de Madrí; el chirashi sushi de tartar de atún rojo o pescados y carnes, a la parrilla o en otras versiones, como la corvina con calabacines y pisto de verduras a la puttanesca o el secreto ibérico con ensalada de tirabeques y patata baby.
En definitiva, el Museo Reina Sofía y El Jardín de Arzábal se transforman durante los meses de verano en el escenario de referencia para todos aquellos que quieran llevar el cine al siguiente nivel y experimentar la fusión definitiva entre arte y gastronomía en un espacio incomparable bajo la luz de las estrellas.
