La DOP Mexillón de Galicia ha reiniciado la certificación en puerto para el mejillón fresco. Esto significa que el bivalvo alcanzó la calidad exigible para ser certificado con dicho sello y garantizar que está en un momento óptimo para su consumo. Con este paso culmina un proceso de producción totalmente natural, ajeno a cualquier aporte externo y ligado a unos ciclos que año tras año se repiten en las aguas de las rías y que resultan fundamentales para la obtención del mejor mejillón do mundo, el Mexillón de Galicia.
Mexillón de Galicia es un alimento único, de una calidad superior avalada por los rigurosos controles que se realizan a lo largo de su período de cría. Y la etiqueta que porta es el distintivo que certifica ese rango y esa autenticidad.
Su sello avala ante los consumidores que están ante un alimento cien por cien gallego, de extraordinario sabor y con unas cualidades nutritivas que lo convierten en imprescindible en una dieta sana y equilibrada. Además, es aconsejable para cualquier edad y ofrece una gran versatilidad en la cocina.
El último eslabón del proceso de control
Portar esa etiqueta es el último eslabón de un proceso riguroso de control que se inicia con la obtención de la semilla en las rocas del litoral, continúa en la propia batea y sigue en el momento de su descarga en puerto. Esa supervisión también se lleva a cabo en los centros de depuración y transformación así como en los puntos de venta. Por eso, el Consello Regulador considera esta tarea de especial relevancia de entre todas las funciones desempeñadas porque proporciona fiabilidad ante los consumidores, que tienen así la certeza de adquirir el mejillón con las características distintivas de calidad y origen que solo proporciona la DOP Mexillón de Galicia.