La diversidad de productos del llagar de Lavandera (Gijón) le obliga a escoger manzanas diferentes para el vermut, la sidra espumosa o la natural.
Se prevé un año de cosecha corta pero intensa, con una manzana que se ha retrasado en su maduración pero que parece llega a su momento clave con buenos índices de calidad. Lavandera se prepara para iniciar la cosecha este fin de semana. Los parroquianos ya han puesto a punto sus tractores para llevar al único llagar exclusivo de Denominación de Origen en Asturias su producción, que no se prevé que sea muy grande debido al fenómeno de la vecería.
En Trabanco Lavandera solo entra manzana asturiana para elaborar su sidra seleccionada. Ha sido una apuesta firme de su gerente, Samuel Trabanco, quien señala que “queríamos darle importancia a los cosecheros, a los vecinos que llevan muchos años trayéndonos su manzana, y conseguir ser el primer llagar de Asturias en el que solo se maya Sidra con Denominación de Origen”.
En camino viene una cosecha que poco se parece a la del año pasado pero que augura una sidra de gran calidad. Ha madurado con calma. La enóloga, Eva Trabanco, se afana en analizar el grado de maduración de las manzanas, para recogerlas solo “cuando estén en su momento óptimo”.
La manzana necesaria para elaborar la sidra natural no es la misma que se necesita para la sidra espumosa o para el nuevo vermut Alma de Trabanco. Por ejemplo para las brut se escogen parcelas de la Finca La Llomba, que se dejan sobremadurar ligeramente para poder lograr más grado alcohólico, mientras para el vermut se prefieren manzanas dulceamargas, que son las que mejor se ensamblan con la base de vermut. Eso implica cada vez más esfuerzo y pensar antes de que llegue la manzana a qué producto se va a dedicar, aunque por el momento, la sidra natural ocupa el 85 % del espacio en el llagar.
Las prensas de madera están ya preparadas para que el “líquido patrio” comience a deslizarse por las tablas y surja esa fantástica sidra dulce que después de la fermentación se convertirá en la sidra natural de escanciar que todos conocemos. Estas prensas tradicionales, actualmente, son muy poco habituales en los llagares ya que el proceso de elaboración es más laborioso y requieren más personal atendiéndolas. Lo cierto es que aunque es más lento el resultado que dan es una sidra más fina y elegante. De hecho, toda la Sidra de Manzana Seleccionada pasa por esas prensas de madera, así como la sidra sobre la madre, que este año se agotó en tan solo dos meses y medio y batió record de ventas.
En los últimos meses Trabanco ha sacado al mercado dos nuevos productos: Pecado del Paraíso y Alma de Trabanco, o lo que es lo mismo, una nueva sidra brut y el primer vermut blanco con sidra en rama.
En Lavandera, comienza la recogida de la manzana y hasta diciembre se vivirán días intensos, apasionantes, momentos en familia “pañando manzanes”, despedidas emotivas y un sinfín de aventuras que darán como resultado una sidra lo más “pistonuda” posible.