La Red Europea de Ciudades del Vino (Recevin) ha acordado prorrogar la capitalidad de esta localidad burgalesa miembro de la Asociación Española de Ciudades del Vino (Acevin) y aplazar al próximo año el desarrollo de la programación ligada a este nombramiento. En la imagen, la Plaza Mayor y el Ayuntamiento de la localidad burgalesa.
Aranda de Duero, una de las ciudades que integran la Asociación Española de Ciudades del Vino (Acevin), ha sido ratificada como la próxima Ciudad
Europea del Vino, una iniciativa creada desde la Red Europea de Ciudades del Vino (Recevin) y en la que cada año se selecciona una ciudad relacionada con la producción y la cultura vitivinícola, ubicada en alguna zona protegida por una Denominación de Origen.
Rosa Melchor y Raquel González
La decisión se ha tomado en la reunión celebrada recientemente en la que Rosa Melchor, presidenta de Acevin, y Raquel González, alcaldesa de Aranda de Duero, propusieron el aplazamiento de la iniciativa hasta el próximo año 2022 a causa de la inestable situación mundial provocada por la crisis sanitaria de la Covid-19.
Aranda de Duero fue elegida como Ciudad Europea del Vino 2020. La lógica suspensión de los actos previstos durante el pasado año se ha ampliado a este 2021, a la espera de contar con un marco más seguro y atractivo para poner en marcha toda la programación ligada a este evento. La iniciativa Ciudad Europea del Vino tiene carácter rotatorio y en ella pueden participar los países que forman parte de Recevin. Las candidaturas siempre deben tener una dimensión europea y demostrar creatividad, siguiendo criterios como el reforzamiento de las actividades de sensibilización en la cultura del vino, la implicación del máximo número de actores económicos y sociales del territorio o la creación de un proyecto catalizador para el desarrollo de la ciudad.
Herramienta de potenciación y promoción turistica
Durante los doce meses en que se ostenta el título de Ciudad Europea del Vino se desarrollan numerosas acciones y actividades culturales, formativas y de sensibilización, encaminadas a dar a conocer el patrimonio, el paisaje y la gastronomía del destino elegido, teniendo como hilo conductor el mundo del vino. Así, esta iniciativa se convierte en una excelente herramienta de potenciación y promoción turística, en la que se reconoce una candidatura que proyecta la cultura del vino y las tradiciones del territorio vitivinícola, contribuye a preservar los recursos naturales y paisajísticos que hacen del vino un producto de calidad y permite consolidar vínculos con otras regiones europeas.
Cambados (Pontevedra) y Jerez de la Frontera (Cádiz) son las ciudades españolas que han ostentado el título de Ciudad Europea del Vino en anteriores ocasiones. En la última edición celebrada, la de 2019, fue la comarca de Sannio, en la provincia italiana de Campania, la protagonista.