El 4 de Julio es el Día de la Independencia de los Estados Unidos. Por ello, familias y amigos se reúnen, disfrutan de actividades al aire libre y espectaculares fuegos artificiales. Por supuesto, la comida también tiene un papel fundamental, y lo habitual es preparar barbacoas para aprovechar el buen tiempo. Conocido en Madrid por sus hamburguesas y carnes ahumadas de aroma inconfundible, New York Burger se convierte en el lugar perfecto para disfrutar de este día con una propuesta muy especial.
Durante la primera semana de julio, New York Burger ofrecerá un delicioso menú completo inspirado en las barbacoas familiares con el que descubrir diferentes cortes de carne ahumada y cocinada entre 6 y 14 horas. Una propuesta para compartir entre dos personas compuesta por media ración de alitas, seguida de tacos de brisket o pulled pork a elegir, medio costillar de cerdo asado y burger especial de brisket o pulled pork, incluyendo una bebida por persona. Una delicia que podrá degustarse desde el 1 hasta el 7 de julio por un precio de 18,50€.
El responsable de esta propuesta gastronómica es Pablo Colmenares, que, tras formarse en Le Cordon Bleu de Londres y trabajar durante tres años en las cocinas de DiverXO, busca la innovación y el sabor autentico tradicional americano en cada una de sus elaboraciones desde una base de herencia americana a la que añade su toque personal.
Ya son cinco las sedes de New York Burger en las que se podrá celebrar el Día de la Independencia. De hecho, su última apertura en Moraleja Green con decoración a cargo de Proyecto Singular ha sido reconocida con una nominación a los Restaurant & Bar Design Awards, que reconocen a nivel internacional el diseño de espacios de restauración.
Además, a partir de este próximo domingo 30 de junio, el local situado en la calle Recoletos abrirá de lunes a domingo, permitiendo al público de la zona centro de Madrid disfrutar todos los días de la semana de la cocina de New York Burger
Las hamburguesas
Las hamburguesas de New York Burger se preparan con carne de ganado cebón de primera calidad y origen 100% español. Cada día, se pican y amasan las piezas de carne fresca, sin congelar en todo el proceso ni añadir aditivos. Después, las hamburguesas se cocinan en un horno de carbón que aporta un sabor y aroma inconfundible. El resultado son 17 variedades de hamburguesas gourmet a la brasa.
En New York Burger, cada hamburguesa toma su nombre de los barrios y edificios más emblemáticos de La Gran Manzana y se pueden disfrutar acompañadas de una guarnición de patatas fritas, patatas gajo con o sin queso cheddar derretido, patatas al horno con salsa de queso mascarpone, queso crema, crema agria o mantequilla, patatas baby asadas con romero, ensalada NYB, puré de patatas con salsa de carne o ensalada de col. Dentro de la carta, destacan la Soho, bañada a la parrilla con salsa BBQ, queso cheddar, bacon crujiente y aros de cebolla; Chrysler Tower, servida con queso azul, salsa de arándanos, tomate y cebolla roja; o la Harlem, con huevo frito, bacon, tomate, lechuga y cebolla a la parrilla. Los más carnívoros se volverán locos con la Meat Packing, con doble carne y de queso cheddar, bacon caramelizado y salsa New York Burger, siempre servida al punto.
La carta ahumada
Tras meses de investigación y viajes por los Estados Unidos, el chef Pablo Colmenares volvió de Texas en 2017 con un horno del tamaño de una habitación. En él, cocina lentamente (entre 6 y 14 horas) diferentes cortes de carne con el humo de madera de nogal americano. El resultado es una jugosidad asombrosa, una textura suave que hace que la carne se desprenda fácilmente y un sabor repleto de matices sorprendentes.
En tan solo un año, han conquistado al público carnes ahumadas como el brisket (delicioso corte de pecho de Angus Black), la costilla de vaca, que se sirve con salsa BBQ o bourbon; o el pulled pork (carne de cerdo ibérico mechada y ahumada). Más tradicionales, pero con sello propio, son las costillas de cerdo o la pechuga de corral ahumada. Todas las carnes pueden degustarse o servidas en una tabla y acompañadas de encurtidos y guarniciones de la casa, o en el interior de unos tacos con tortillas de maíz acompañadas de guacamole o bien en un delicioso sándwich.
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