Desde hace tiempo, la Costa Brava busca posicionarse como referente en el turismo de calidad, y la gastronomía no deja de ser un magnífico pilar sobre el que apuntalar este objetivo. En la imagen, la chef Marisa Fernández y la periodista y escritora Marta Robles que han promocionado en Madrid Girona como destino «wellness».
Con más de 2.000 establecimientos en los que se practican muy diversas cocinas, sobresalen sin duda en Girona los 16 restaurantes tocados con la varita de la Guía Michelin, que ha otorgado a la provincia un total de 20 estrellas.
Pero Girona en general, y la Costa Brava en particular, va mucho más allá, y busca presentarse al visitante como un excelente lugar para relajarse, montar en bicicleta por las vías verdes, hacer senderismo por los caminos de ronda, o disfrutar de la comida más saludable. En definitiva, un lugar para perderse en la Naturaleza y conectar con el interior.
Para ello, el Club de Marketing de Salud y Bienestar de la Costa Brava y el Pirineo de Girona, impulsado por el Patronato de Turismo de la Diputación de Girona, pone a disposición de los turistas más de una treintena de hoteles, centros y clínicas especializados en salud y bienestar que incluyen en sus ofertas baños de bosque, senderismo terapéutico, retiros, escapadas de bienestar y, cómo no, gastronomía saludable fundamentada en productos locales.
Para presentar esta estrategia orientada al turismo “wellness”, la Diputación de Girona contó con la presencia y participación de la chef Marisa Fernández, que atesora más de 25 años de especialización en alimentación natural, y la periodista y escritora Marta Robles, muy vinculada emocionalmente a la provincia. Ambas prepararon algunos platos de cocina macrobiótica, que hunde sus raíces en el equilibrio entre ingredientes, colores y sabores.