Esta verdura es rica en fibra, lo que ayuda a mejorar el tránsito intestinal y a reducir la absorción de las grasas presentes en la dieta. Otros alimentos como la ganada o la alcachofa benefician a quienes practican deporte, gracias a sus labores antioxidante y diurética, respectivamente.
Tras los excesos alimenticios cometidos durante el verano y con la llegada del otoño, el brócoli se convierte en un alimento ideal para ayudar a bajar peso y a recuperar la figura, gracias a su bajo contenido en calorías y su aporte en fibra, beneficioso para reducir el apetito y contribuir a la saciedad.
A pesar de ser un producto del que se puede disfrutar durante los 365 días del año, tanto en fresco como congelado, el brócoli comienza su temporada más fuerte en otoño y puede ayudar a eliminar esos kilos de más adquiridos durante las vacaciones estivales.
Ello es debido a su alto valor nutritivo: además de ser bajo en calorías y alto en fibra, que ayuda a mejorar el tránsito intestinal, contiene vitaminas A y C, minerales K y Se y fitoquímicos beneficiosos como los isotiocianatos (sulforafano) e índoles (índole-3-carbinol), que “actúan detoxificando el organismo” y que “reducen la inflamación crónica asociada al estado obeso”, según indica Diego A. Moreno, investigador del Laboratorio de Fitoquímica del Departamento de Ciencia y Tecnología de Alimentos de CEBAS-CSIC, que colabora de manera activa con la Asociación +Brócoli, que promueve el consumo de esta verdura.
Además, el brócoli tiene “capacidad para inhibir la actividad de una enzima llamada lipasa, lo que ayuda a disminuir la absorción de las grasas presentes en la dieta”, como valora Javier Marhuenda, académico de número de la Academia Española de Nutrición Humana y Dietética.
Un alimento recomendado para quienes practican deporte
Otros alimentos que también pueden ayudar a eliminar peso dentro de una dieta marcada por un especialista son vegetales ricos en carotenoides como la calabaza y la zanahoria y en ácidos grasos saludables tipo omega-3 como las semillas de lino o el pescado azul, que ayudan a “reducir el colesterol, a regular la presión arterial y a mantener el corazón sano”, según añade Moreno.
Por su parte, Marhuenda destaca la importancia de disminuir los alimentos fritos o con mucho aceite y aumentar el consumo de verduras en general, tanto crudas como cocinadas. Sobre todo, si pretendemos practicar deporte para acompañar la alimentación saludable en la pérdida de kilos, ya que muchas, como el brócoli, son ricas en proteínas, que ayudan al metabolismo en la reducción de apetito, “cambiando algunas hormonas relacionadas con el peso corporal, favoreciendo que se quemen más las calorías ingeridas, etc.”, según indica el experto en nutrición.
Otros productos de otoño como la calabaza y la granada, que aporta polifenoles antioxidantes naturales, son muy recomendables en la práctica de ejercicio físico, así como la alcachofa, recomendada para deportistas desde la asociación nacional que la promueve, Alcachofa de España, por su contenido en fibra, y el huevo, el pescado, la carne o los lácteos, que proporcionan proteína de alto valor biológico.
“La pérdida de electrolitos con el sudor durante el deporte hace indispensable reincorporar minerales en nuestra alimentación, como el potasio, el calcio, el fósforo, el magnesio y el hierro del brócoli, que ayudan a recuperarnos de una actividad intensa y que reducen el riesgo de lesión”, resalta Marhuenda.
