Con motivo de la conmemoración del Día de la Mujer el próximo 8 de marzo y para homenajear el trabajo de todas las mujeres en el sector de la gastronomía en España, Facyre (Federación de cocineros y reposteros de España) junto con la ONG Mujeres en Igualdad han organizado en el espacio gastronómico Platea un coloquio para reflexionar sobre el papel y los retos a los que se enfrenta el género femenino en el mundo gastronómico. Junto a grandes profesionales de la gastronomía, ha participado la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría.
En Platea se han dado cita grandes profesionales de la hostelería como las chefs Estrella Michelín Pilar Idolate y Beatriz Sotelo, Pepa Muñoz (2 soles Repsol), empresarias como Cristina Oria o profesionales del mundo de la docencia como Rosario Barrios, directora general de le Cordon Bleu. Todas ellas han compartido sus experiencias personales y la necesidad de un cambio en la sociedad para la igualdad entre géneros, tanto en el mundo de la gastronomía como en otros sectores.
Conciliación, igualdad, horarios sin límite… El mundo de la cocina tradicional ha sido históricamente femenino, mientras que la alta cocina se ha asociado al género masculino. Por ello, es necesario encontrar un equilibrio para que las mujeres no renuncien a la realización profesional, educando y buscando soluciones justas para la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres como concluían las interlocutoras.
La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha destacado en su intervención la capacidad de organización de las mujeres y su visión práctica de la vida y ha asegurado que, pese a las dificultades, «cuando se quiere se puede» y «cuando una mujer quiere, puede y mucho».
Además, ha resaltado la importancia que tiene la gastronomía en nuestro país; su gran riqueza, sinónimo de la pluralidad de nuestros sabores; nuestro buen hacer y capacidad de acogida y hospitalidad, lo que repercute en un aumento de visitantes que buscan conocer nuestros grandes tesoros culinarios. Además del hecho de que cada vez hay más mujeres en lo más alto de este sector, lo cual supone un orgullo.
