Los jamones y paletas de Teruel cuentan con el certificado que resalta su Denominación de Origen. Este sello va más allá de significar seguridad y calidad alimentaria, además, premia la excepcionalidad de lo auténtico.
“Marcado a frío” es la campaña financiada por la Unión Europea que pone en valor el proceso de producción de este manjar tan característico. Es el clima y las peculiaridades de la provincia de Teruel los que hacen que las piezas necesiten menos sal para su curación.
Para que sea DOP Jamón de Teruel cada pieza debe de tener una vitola numerada, la pezuña, una estrella de ocho puntas marcada a fuego con la palabra “Teruel” y un código de trazabilidad que guarda datos relevantes sobre el conjunto del proceso, características distintivas que aseguran un jamón con una textura y calidad espectacular.