El último sábado de mayo, la Finca Montenuevo, situada en el término municipal toledano de Calera y Chozas, a 135 kilómetros de Madrid, albergó la sexta edición de una historia de éxito, Jardines de Campo Open Day (vídeo del evento en origenonline.es) , cuyo prestigio se ha ido incrementando poco a poco, aunque nos lo han ido contando en voz baja, como corresponde a las iniciativas apoyadas en un cierto barniz de exclusividad, no de elitismo. En la foto, de izquierda a derecha, los representantes de Alma Natura, tras recoger uno de los Premios a la Conservación de las Tradiciones de manos de Felipe Díaz de Bustamante (con sombrero) y el Duque de Calabria.
Texto: Luis Ramírez. Fotos: Origen
Como señaló en su balance Felipe Díaz de Bustamante, el ideólogo de esta singular combinación de feria y mercado, que se desarrolla con el cielo como techo, salpimentada con propuestas paisajísticas y una reivindicación del mundo cinegético, “se trata tan solo de una pequeña muestra de lo que puede hacer la iniciativa privada para fomentar la calidad del mundo rural. Esto es el resultado de un gran esfuerzo personal y familiar para hacer controlable la visita, durante un día, de 2.500 personas y de 110 expositores. Defendemos que otros emprendedores puedan desarrollar modelos parecidos para que los agricultores y los ganaderos puedan mostrar, al aire libre, la calidad de la labor que desarrollan”.
Un entorno bello y natural
Díaz de Bustamante (que lamenta no haya habido este año espacio para otro medio centenar de iniciativas dispuestas a participar en el encuentro, pero que tendrán hueco en 2020) reivindica también el espíritu con el que acuden a su finca toledana (llena de encinas y de alcornoques, alrededor de las cuales corren codiciadas piezas cinegéticas), tanto los visitantes como los expositores: “Llegan dispuestos a dejarse sorprender y a vivir la experiencia con los cinco sentidos, algo que no es nada habitual en España. Porque, en el fondo, todos queremos disfrutar de un entorno bello y natural y dejarnos llevar. Por eso es importante controlar el tamaño de la feria y el número de asistentes. Si se nos escapa de las manos, perdería su razón de ser”. ORIGEN y AgroNegocios han ejercido este año como medios colaboradores de esta iniciativa tan singular cuya filosofía compartimos.
Año tras año, Jardines del Campo Open Day (que en también un encuentro de una cierta alta sociedad vinculada al mundo rural, por lo que alguien lo ha llamado “el Ascot español”) se consolida como un proyecto sólido que, sobre todo, contribuye a difundir y pregonar los grandes valores del campo, reivindicando la verdadera sostenibilidad, la que trasciende a las modas. Y su promotor es un defensor entusiasta de las razas autóctonas ganaderas, especialmente las que están en peligro de extinción, que son una gran mayoría. De hecho, le encantaría promover un encuentro específico alrededor de estos tesoros ganaderos, igual que un monográfico de producción ecológica, ambos a partir de un planteamiento similar.
Joyas “gourmets”, hamburguesas y showcookings
Pero, por el momento, por la Finca Montenuevo han desfilado este año verdaderas joyas gourmet, como los vinos de Abadía Retuerta, los aceites de Molino de Casilda, las piezas de pan y repostería de Harina, los quesos de Dehesa de Majazul, o las joyas ecológicas de Dehesa El Milagro, entre otros muchos. Tuvieron también un gran recibimiento, en un sábado caluroso, casi en el límite de provincia entre Toledo y Cáceres, las pastas Garofalo, cuyos “showcookings” disfrutaron de una nutrida concurrencia, y las diferentes hamburguesas Premium. La cerámica o la cestería, como oficios ancestrales y artesanales, revivieron también en Jardines de Campo Open Day. Mercedes y Estrella Damm fue dos de los patrocinadores principales.
Además cada año se entrega un Premio a la Conservación de las Tradiciones que, en este caso, quedó repartido: recayó en la Montería a Caballo, la modalidad cinegética más antigua de nuestro país; y también en la empresa onubense Alma Natura, que diseña y promueve más de 200 proyectos en toda España para el desarrollo de pueblos abandonados. Ambos galardones fueron entregados en esta ocasión por Pedro de Borbón Dos Sicilias, Duque de Calabria, encantado de participar en una feria genuinamente rural que se desarrolla en el más real y natural de los entornos.