Con la llegada del otoño, nuestros campos se llenan de un espectáculo de colores para los sentidos. También los platos de la alta gastronomía representan desde hace tiempo el lienzo perfecto para propuestas que abordan el universo de plantas y flores, en las que, más allá de ser únicamente un recurso visual, sirven para enriquecer las recetas a través de multitud de matices, sabores y texturas. Conversamos con diferentes expertos en gastronomía floral para conocer más sobre esta interesante propuesta.
Por Efa Rimoldi
La neurogastronomía ofrece una nueva perspectiva para entender y mejorar la experiencia gastronómica, integrando la percepción sensorial con el procesamiento cerebral de los sabores. En un mercado competitivo, esta disciplin
Crear experiencias gastronómicas únicas
En el competitivo entorno de la industria gastronómica, la innovación y la mejora continua de la experiencia del cliente son esenciales para destacar. El gran desafío de nuestros chefs está en la creación de experiencias gastronómicas excepcionales.
Desde hace un tiempo es frecuente que nos sirvan una ensalada, una tarta o un plato salado adornado con flores comestibles. Parece algo novedoso y reservado a la nueva cocina y alta pastelería; sin embargo, el uso de flores para complementar una receta ya viene de hace siglos cuando en lugares como México se empleaba la flor de calabaza; los romanos, las violetas o los postres indios que eran adornados con pétalos de rosa.
Diferentes chefs innovan y desarrollan la gastrobotánica, disciplina que fusiona dos campos del conocimiento humano, gastronomía y botánica para unirlos en un concepto cuyo resultado beneficia a ambos, utilizando métodos culinarios y científicos para extraer sabores y texturas únicas de las plantas. Un excelente ejemplo es “La Chef de las flores”, Iolanda Bustos, autora del libro: “Cocinar con flores”, nos explica que “esto significa mucho más que añadir sabor o propiedades a las recetas, puesto que las flores contienen nutrientes que alimentan el alma, proporcionan bienestar, mejoran el sentido del humor y convierten cualquier receta en un festín para los sentidos”.
Disposición de los alimentos en el plato
Por ejemplo, la apariencia y la disposición de los alimentos en el plato son factores críticos que influyen en la percepción de los clientes. La vista es el primer sentido que interactúa con la comida, seguido del olfato. Estos sentidos iniciales pueden predisponer a los clientes a una evaluación positiva o negativa de la comida, incluso antes de probarla. Una presentación atractiva puede realzar la percepción del sabor y la calidad del plato, haciendo que la experiencia gastronómica sea más satisfactoria.
En este sentido, las plantas aromáticas y flores ofrecen un amplio abanico de posibilidades para jugar y sorprendernos con nuestros 5 sentidos. Lo más interesante es que son fáciles de cultivar y necesitan poco espacio para crecer: una repisa en la ventana, una terraza o un rincón del jardín sirven para llenar tu vida de sabor. No hay que perder de vista que las hierbas aromáticas no sólo dan sabor, también nos dan salud. Se usan en la cocina y en medicina casera para muchos problemas. La mayoría son digestivas, por eso se añaden a platos de digestión pesada como las legumbres y guisos. También suelen ser antisépticas, y de ahí viene la costumbre de aliñar carnes y pescados, alimentos que se deterioran rápidamente, con mezclas de hierbas aromáticas y especias. Abren el apetito y ayudan a que los niños coman mejor y descubran nuevos sabores, una pizza simple con queso y tomate y orégano puede ser un plato casero y natural para la cena de los viernes en casa. Tienen propiedades antiinflamatorias y hasta ayudan a mejorar el metabolismo, ganar músculo y perder grasa.
La gastrobotánica es una verdadera revolución en la forma en que concebimos y disfrutamos la alimentación. Los beneficios son innegables: desde una mayor diversidad de nutrientes que enriquecen nuestra dieta, hasta un compromiso firme con la sustentabilidad que respeta nuestro planeta.
Desde ORIGEN, nuestra invitación es a experimentar con nuevas plantas, sabores y texturas en tu cocina-paladar. Porque, además ser saludable y sostenible, nos permite sumergirnos en un universo gastronómico lleno de posibilidades. La gastrobotánica es una invitación a redescubrir el placer de saborear con nuestros 5 sentidos.
“La esencia de la gastrobotánica es rescatar del olvido productos con un valor gastronómico brutal, reconducir su producción y ensalzarlos en el plato»
Rodrigo de la Calle
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