En febrero de 2022, el Diario Oficial de la Unión Europea aprobó la condición de Vino de Pago para la Dehesa Peñalba, que incluye 80 hectáreas de viñedo en la localidad vallisoletana de Villabáñez, situada en la Milla de Oro del Duero, aunque fuera del ámbito de la Denominación de Origen Ribera del Duero. Así, la Bodega Vizar, ubicada en dicho Pago y certificada en producción ecológica, se convirtió en la primera en adquirir dicha condición en todo el entorno del río Duero.
Texto: Luis Ramírez. Fotos: Vizar y Origen
Como nos dice, recién acabada la vendimia, Isabel Turrado, la gerente y “alma mater” de Vizar, 
ocho años en la empresa, durante todos los cuales se ha desarrollado el proceso que culminó en la aprobación del Pago, esto ha representado “un antes y un después” en la historia de la bodega propiedad, desde hace más de dos décadas, de la familia Zarzuela, cuatro generaciones vinculadas al mundo de la construcción en Castilla y León.
Isabel Turrado nos explica que Dehesa Peñalba ha adquirido la condición de DOP Pago por el cumplimiento de una serie de exigentes condiciones: “Por tradición vinícola desde el siglo XIV, pues nos consta y está documentado que aquí ha habido viñedo desde entonces. También por el entorno natural, rodeados, en primera línea por el canal del Duero y, justo detrás por el propio río, además de los pinares centenarios y los montes de Villabáñez de alrededor. Unos elementos naturales que amortiguan los efectos climatológicos adversos, del tipo heladas o granizadas, como hemos podido comprobar en varias ocasiones. Y finalmente, que la bodega esté situada dentro del Pago, como ocurre con el concepto Grand Cru de
los franceses, y que solo podamos utilizar nuestra propia uva, lo que representa que todo el círculo vitivinícola se cierra en la propia finca, que también acoge la elaboración del vino y el embotellado. La DOP Vino de Pago representa, por lo tanto, estar en la cúspide en la pirámide de la calidad”.
La gerente de la Bodega Vizar resalta que “en un escenario tan masificado para el mundo del vino como el entorno del Duero, con tantas bodegas y marcas, hemos quedado avalados con un sello que implica calidad y origen después de que, por meras razones técnicas y no geográficas ni culturales, quedáramos en su día al margen de la DO Ribera del Duero”. Alrededor de la mitad de la producción de Vizar se destina a los mercados internacionales, sobre todo Centroeuropa, pero también Estados Unidos y Latinoamérica.
Vinos de Pago y vinos de la Tierra de Castilla y León
Como vinos de Pago, Vizar comercializa tres referencias diferentes, todas ellas tintas, como está
en el espíritu de la bodega desde sus inicios. Se trata de un Vizar Prestigio, con 12 meses de barrica, que refleja el 100 por 100 de la Finca, por lo que es “una combinación de las cuatro variedades que en ella conviven, prioritariamente Tempranillo y después Syrah, rematadas por porcentajes residuales de Cabernet Sauvignon y Merlot, quizá no tan adaptadas al territorio como las dos anteriores. Creo que es un vino que nos diferencia perfectamente”. Luego está el Selección Especial que solo lanzan en añadas especiales y es una combinación de Tempranillo y Syrah en porcentajes equilibrados “y el tercer vino -nos dice Isabel- es un monovarietal de Syrah, el vino diferente y que tanto nos representa, muy poco habitual en la zona, entre otras cosas porque esta variedad no está autorizada por el Consejo Regulador de Ribera de Duero”.
Al margen de la DOP Pago y adscritos a la IGP Vinos de la Tierra de Castilla y León, la bod
ega vallisoletana también comercializa, como complemento, dos blancos, un cuidado Verdejo joven y otro fermentado en barrica, de muy limitada producción y más gastronómico, que ha tenido una excelente acogida en el mercado. Y también un Tempranillo joven, “un buen vino de barra”, y el Barrica, “con ocho meses de roble y un corte más especial”.
La confusión de los Pagos
En toda España son 24 las bodegas acreditadas como DOP Vino de Pago, la mayor parte de ellas radicadas en Castilla-La Mancha, peo también en la Comunidad Valenciana, Castilla y León, Navarra o Aragón. Hay cierta confusión pues luego existen algunas bodegas que llevan el nombre de Pago en su denominación aunque no cumplan alguna de las condiciones requeridas y otras integradas en la asociación Grandes Pagos de España que tampoco están realmente avaladas por Bruselas.
Para aclarar esta situación, que genera cierta desinformación entre los consumidores, se
acaba de poner en marcha la Asociación Unión de Vinos de Pagos Certificados, actualmente presidida por la Bodega Vegalfaro. Aunque no acoge todavía a todos los Pagos españoles, porque los hay que quieren ir de por libre, en Vizar, uno de los cuatro socios fundadores, consideran que será importante a la hora de promocionar el concepto, negociar con la Administración y abrir puertas a estas bodegas en los mercados internacionales.
