El 1 de octubre se puso en marcha una propuesta cercana y flexible, una variedad de opciones dentro de Café Saigón, que responden a distintas fórmulas que se articulan de manera armónica, logrando un concepto completo, actual y enormemente atractivo.
De lunes a viernes, en horario de comida, se puede disfrutar del Menú Ejecutivo, una apetitosa propuesta realizada con una selección de platos representativos de la carta, que incorporará novedades cada mes, y con la que se abren interesantes posibilidades para comidas de trabajo o de carácter más ágil y rápido, sin por eso renunciar al sabor y a la calidad.
El espacio de la barra, antes reservado solamente a uso de bar, evoluciona al siguiente nivel e incorpora una carta de picoteo y tapas. Una opción más informal en la que aunar la mejor comida vietnamita, con un concepto cercano al del gastrobar.
Mesas y sillas altas, y un ambiente con identidad propia dentro del espacio de Café Saigón, marcado con preciosas celosías, donde la conversación y la diversión estarán garantizadas.
La coctelería se refuerza como una de las claves para esta nueva temporada, un nuevo bartender hará las delicias de los más aficionados a las mezclas de sabores fuertes, exóticos, frescos y sorprendentes durante toda la franja horaria de apertura.
Otra de las apuestas para esta nueva etapa, es la organización de eventos. El espacio de Café Saigón ofrece las condiciones necesarias para poder adaptarse a las variadas propuestas que tanto tu empresa, familia o grupo de amigos, pueda tener.
Café Saigón es la máxima expresión de la gastronomía vietnamita en Madrid. Ofrece una experiencia culinaria de la mano de una cocina de respeto al producto e innovación contante que se desarrolla en un ambiente sofisticado y exclusivo.
Su decoración combina las notas del ambiente colonial con las últimas tendencias en diseño de interiores. Marcadas líneas geométricas y amplitud de espacios, una original gama cromática de grises con notas doradas y malvas, piezas como la consola del siglo XIX o las maderas y balaustradas que adquieren su protagonismo al cruzar las puertas de entrada, reúnen todo lo necesario para recrear un ambiente agradable, acogedor y distinguido, que nos transporta a tierras orientales.
La distribución en dos alturas, permite disponer de un espacio de lujo y ambiente chic-oriental a modo de salón principal con mesas, sofás y sillas de corte moderno en combinación con las piezas históricas, con una segunda planta donde el espíritu colonial alcanza su máxima expresión dando forma, color y ambiente a los espacios más íntimos del restaurante.
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