Desde mayo, La Canica (www.lacanicamadrid.com) mantiene abierta, de la mano de Sergio Martínez, su segunda sede en Infanta Mercedes con la misma filosofía: buen producto, cocina renovada y precios razonables, que ha tenido un gran éxito en Campo de las Naciones.
La Canica abrió en mayo, muy cerca de Plaza de Castilla, su segundo restaurante, justo cuando se cumplía el segundo aniversario del local situado en Campo de las Naciones (Avda. de los Andes, 25). Tanto en cocina como en decoración, Sergio Martínez ha tenido idéntico objetivo: un lugar en el que sentirse a gusto y donde disfrutar de platos renovados pero de inspiración tradicional bien hechos. Es decir, buena cocina producto con el toque personal del chef.
Comparten la misma carta, sencilla pero completa, que se divide en cinco apartados. “El comienzo en La Canica” incorpora algunos platos nuevos, como las Alcachofas de temporada rebozadas con aceitunas sanguinas, con gran contraste de sabores, los Buñuelos de merluza de pincho tintados al eneldo o el excelente Canelón de carpacho de ternera con hierbas aromáticas, parmesano y encurtidos, muy adecuada para lo que queda
de verano. Los falsos arroces o, mejor dicho, “Los arroces entre comillas de La Canica”, elaborados con sémola de trigo, se han convertido en una seña de identidad de su cocina. Por ejemplo, El de pollo de corral y verduras o el Arroz entre comillas con butifarra de Perol y chipirón, que mezcla mar y tierra en un mismo plato.
En “De la granja a La Canica”. la Pluma ibérica 100% bellota a la parrilla, ajil y parmentier de sobrasada dulce y el Pollo picantón asado con Champagne y trufa. Y en «De La Lonja a La Canica», la Merluza de pincho de Celeiro a la romana, emulsión de chirimoya y pimientos de Padrón.
Se mantienen platos ya clásicos de La Canica como las Setas Shiitake salteadas con ali oli de miel, el rotundo Criollito con hojas de hierbabuena y mostaza verde dulce y, por supuesto, Las Canicas del Chef (croquetas de estofado de carrillera). Una tarta de manzana para el postre y algún aguardiente gallego de calidad pueden poner un buen final al encuentro gastronómico en La Canica.
De la decoración se ha encargado Zooco Estudio creando un diseño lleno de contrastes pero a la vez armónico. Paredes que combinan el ladrillo rojo con azulejos de color; techos de madera con grandes lámparas; coloridas sillas con tapicerías de terciopelo y cómodos sillones mostaza, que hacen un guiño al famoso chester amarillo de La Canica de Campo de las Naciones. La fachada está formada por grandes cristaleras que se mueven haciendo de La Canica un restaurante abierto, a modo de terraza, perfecto para el buen tiempo.
A la entrada una zona de barra que destaca por los tonos suaves de la madera y el cristal, y algunas mesas altas para tomar los estupendos cócteles o degustar una comida de una manera más informal.
El joven Sergio Martínez, chef y copropietario de La Canica e hijo de José Luis Martínez (hoy al frente de la interesante Taberna y Media del barrio de Retiro), es también profesor en la Escuela Chicote. Formado en la Escuela Superior de Hostelería y Turismo de Madrid, a sus 26 años tiene ya una larga trayectoria, habiendo pasado por las cocinas de varios restaurantes -algunos de ellos con estrella Michelin- y llevando la gestión del restaurante “Ideas” en Miami. Hace dos años comenzó su proyecto personal en Campo de las Naciones y continúa “caniqueando por Madrid” con la apertura de este nuevo local en Infanta Mercedes, que probablemente no será el último.
