Begoña Fraire, ex-modelo reinventada en cocinera emergente, ha dejado su primer restaurante madrileño, Seis Ocho, para introducirse, a través de Etimo, en el corazón de Madrid (Ayala, 27), anterior sede de otros exitosos restaurantes, y poder mostrar mejor su cocina en un barrio donde la gastronomía de la capital tiene algunos de sus máximos representantes. Es en este caldo de cultivo donde la chef quiere desarrollar su trabajo, basado en el recurso a productos de temporada de la máxima calidad.
El nuevo proyecto de Etimo engloba interesantes cambios y muchas gratas sorpresas, todo ello sin abandonar una filosofía que define a la chef como la utilización de productos de mercado de temporada de
la máxima calidad, verduras, hortalizas y frutas sin intervención química en su proceso de elaboración o manipulado, carnes sin maltrato animal y la naturaleza del producto biológico como sello de identidad, abanderando una cocina sana y de calidad. Una oferta de corte muy actual y con una pasión que hace crecer las expectativas, aunque todavía se encuentre en fase de rodaje.
Begoña Fraire, que se formó en la prestigiosa escuela de cocina francesa Le Cordon Bleu, crea una cocina contemporánea, creativa y donde el sabor marca sus platos, resulta
do de su experiencia profesional vivida con algunos de los más grandes chefs de nuestro país y de los continuos viajes que realiza por el mundo y que nutren su conocimiento gastronómico
La cocina de Begoña se puede descubrir a través de un menú al precio de 60 euros integrado por un entrante, dos platos principales y un postre. Por ejemplo, alcachofas con ní
scalos y queso de Mahón; almeja gallega con garbanzos y caldo de legumbres; vaca vieja con ajo negro y brócoli; y crema brulée de citrícos con chocolate y almendra.
En este nuevo espacio, Begoña incorpora también una mesa del chef en la misma cocina para que los comensales sientan el pulso de la gastronomía de la cocinera en primera persona.
