La campaña del Kaki -amparado en la marca “Persimon”, registrada por el Consejo Regulador de la Denominación de Origen Protegida Kaki Ribera del Xúquer- está transcurriendo con un importante aumento del consumo, consecuencia de la promoción, lo que ha facilitado la venta de la gran oferta de producto de finales de octubre y principios de noviembre, posibilitando la recuperación de los precios y con ello resultados aceptables para el productor.
Así lo asegura Cirilo Arnandis, presidente de la DOP, quien destaca que los principales activos con los que cuenta esta Denominación de Origen Protegida (DOP), y su marca “Persimon” son sus productores, las empresas y cooperativas certificadas socias que lo comercializan, con más de 22 millones de euros invertidos en la promoción en los últimos años, “lo que está dando resultados satisfactorios y que en un año complicado han sido más palpables ya que han contribuido a mantener niveles aceptables de rentabilidad para nuestras producciones y productores amparados bajo la marca comercial “Persimon”.
Y es que, efectivamente, en esta campaña han convivido dos realidades bien distintas en el mercado, el reconocimiento del mercado de la calidad de la marca “Persimon” de la DOP y sus empresas comercializadoras y el resto de la producción no protegida puesta en el mercado.
Binomio salud y kaki
Competir por diferenciación y garantizar precio al agricultor ha sido el principal objetivo de la DOP kaki de la Ribera del Xúquer “un logro que hemos alcanzado a través de la apuesta continua por la innovación y mantener y potenciar las citadas campañas de promoción gracias a las cuales el consumidor conoce y elige el producto etiquetado con la marca Persimon”.
Entre los nuevos retos que se ha propuesto la DOP en el corto y medio plazo, Arnandis destaca como prioritario poner en valor el binomio salud y kaki, “lo que va a permitir también aumentar nuestro valor añadido”.
En este sentido, pone como ejemplo una investigación reciente, la primera en profundidad sobre esta fruta, realizada por un equipo de investigadores de la Universidad de Jerusalem, que concluye que consumir un kaki al día ayuda a prevenir el riesgo de infarto.
Según este estudio, los kakis contienen una concentración significativamente superior de fibra alimentaria, minerales y compuestos fenólicos. Todos ellos vitales para combatir la aterosclerosis que bloquea las arterias, siendo las principales causas de afecciones cardiacas, infartos y accidentes cardiovasculares.
“Desde luego es una excelente noticia que respalda y refuerza el nuevo objetivo que nos hemos propuesto desde la DOP que pasa ahora también en nuestra estrategia de comunicación, por dar a conocer estas propiedades; así el binomio salud y kaki va a ser una de nuestras propiedades”.