Texto: Marta Fernández Guadaño
En 2014, Nacho Aparicio y David Yllera buscaban un local para abrir un supermercado de vocación orgánica, pero encontraron dos en la Plaza de Olavide, en pleno distrito de Chamberí. El resultado es que prácticamente a la vez abrieron una tienda con aire de colmado campestre y un restaurante con una casera basada en los productos que despachan. Después, incorporaron el negocio de La Cocinita de Chamberí, rebautizado como La Cocinita de Mamá Campo; mientras, en primavera de 2015, ampliaron su propuesta con La Cantina de Mamá Campo, bajo un concepto de taberna. En todo caso, su tienda suma una oferta perfecta para comprar a diario fruta, verdura y legumbres procedentes de pequeños productores. “Verduleros a mucha honra”, se autocalifican. Además, la tienda despacha productos envasados ecológicos. Trafalgar, 22. Madrid. Tel. 91 622 75 16.
“Buscadores, fichadores y recomendadores de productos artesanos”, se autopresentan en este proyecto impulsado por unos jóvenes donostiarras. En realidad, se trata de la traslación de un proyecto online al entorno real con un local físico. Pantori arrancó hace unos años como una web de venta centrada en un objetivo: “Descubrir productos con rostro” para hacerlos llegar a consumidores que valoran la calidad de los (más o menos) pequeños productores. Después, abrió una tienda física, que ha asumido en varias ocasiones una apuesta monotemática en torno a un producto o familia de productos de temporada, para ir ampliando poco a poco su oferta y erigirse en un buen colmado reeditado en el centro de Donosti. Reina Regente. San Sebastián. Tel. 943 265 868.
Lleva menos de dos años abierta y ya es una tienda introducida en la rutina de los vecinos del barrio de los Austrias, en Madrid. Kiki Market es el auténtico colmado reeditado en clave moderna y siempre con la idea de promover una compra diaria fuera de “la cadena convencional de la distribución alimentaria”. Una oferta de unas 1.500 referencias (muchas de productos frescos) llena sus estanterías de productos que aseguran ser “cien por cien eco”. Además, el espacio organiza catas, degustaciones y pequeños eventos. Cava Alta, 21. Madrid. Tel. 91 805 86 05.
A un paso de la inquieta zona de Plaza de España, en A Coruña, arrancó este local el pasado otoño. Se trata de una tienda que apuesta por una especialización no tan frecuente en el ‘gastromercado’ gallego: los encurtidos. A partir de una fórmula de venta a granel, que claramente está volviendo, este local expone en su mostrador una amplia oferta de encurtidos, con las aceitunas de diferentes orígenes y variedades, y con las gildas o sus ‘hermanas’ como reclamos. Es decir, todo tipo de banderillas y ‘pinchos’ con aceitunas, pepinillos, cebolletas, piparras, boquerones o anchoas. En algunos casos, las gildas están hechas en la propia casa. A esta propuesta se suma una oferta de conservas de marcas top, junto con frutos secos a granel. Rúa Plaza, 1. A Coruña. Tel. 607 40 90 36.
Arrancó la pasada primavera en el barrio de Malasaña, en Madrid, con la vocación de recuperar el concepto de lechería, aunque casi alcanza el formato de ultramarinos de barrio, lo que contribuye a dinamizar el mercado local. Leche fresca de varios proveedores, batidos, yogures, cuajada, queso fresco y una amplia gama de lácteos, por supuesto, refrigerados y de marcas que defienden una vuelta a la artesanía en este ámbito. Cien por cien natural o ecológico son algunas de las descripciones que acompañan a los productos, dentro de una oferta que se completa con miel, mermeladas y algunos dulces. Manuela Malasaña, 29. Madrid. Tel. 91 029 66 39.
Entre muchas otras, una tendencia ha avanzado en el gastromercado en el último año y medio: la vuelta del comercio a granel, especialmente enfocado al universo de las legumbres. Este concepto de negocio ejemplifica esta tendencia: aquí se vende al peso una amplia variedad de judías, garbanzos o lentejas, presentadas en sacos con su precio por kilo a la vista. Con la idea de “granel selecto’, va variando su oferta de legumbres, a la que se suman frutos secos, harinas, quinoa, especias o pasta seca, vendida también al peso. Como trasfondo, predomina una idea: la compra a granel permite ajustarse a la demanda de cada cliente, que ahorra dinero y envases y que siempre se sirve a sí mismo. Además, organiza talleres que van más allá de sus productos, con temas tan variopintos como el pan o los jabones naturales. También cuenta con un salón de té. Santa Engracia, 77. Madrid. Tel. 810 525 601.
Con sede en Ribeira (A Coruña), Frinsa ideó hace poco más de dos años un formato de negocio para despachar sus conservas a pie e calle. Así surgió La Conservera, local abierto en el barrio de Salamanca y conceptualizado como una tienda. Su extensa colección de latas ‘top’ se venden en un espacio que también acoge catas. Desde el pasado julio, el formato ha evolucionado con un segundo local: La Conservera Delistore & Tapas, en la madrileña calle Mayor, enfrente del Mercado de San Miguel. En este caso, a la idea del ultramarinos en torno al laterío se suma una barra para comer a base de conservas o tapas elaboradas con sus productos. Claudio Coello, 38. Tel. 91 752 79 33 / Mayor, 49. Madrid. Tel. 810 523 631.
Es la sucursal en un hotel de una gran panadera catalana: Anna Bellsolá. Si su sede central es Baluard, una de las panaderías top de Barcelona, desde el verano de 2014 cuenta con este espacio que lleva el nombre del hotel en el que se ubica. El huésped se despierta y huele a pan recién hecho en el obrador que da la bienvenida a este edificio, en el que la recepción está al final de un mostrador en el que se despachan panes de varios tipos. Se realizan en directo y en tiempo real a la vista del público, junto con una oferta de bollería y algunas especialidades saladas. Se pueden tomar allí mismo en la cafetería del hotel (se esté o no alojado en él) o comprar para llevar. Provenza, 79. Barcelona. Tel. 93 343 66 90.
Es el concepto de tienda de productos ecológicos de Tribu Woki, grupo que suma restaurantes como Barraca o Celeri (bajo la dirección de Xavier Pellicer). “Un estilo de vida que busca volver a las raíces, a nuestros orígenes”, es el punto de partida de esta firma, que cuenta con cinco sedes de sus supermercados bio en Barcelona, bajo la enseña Bio Organic Market. Unas 4.000 referencias de productos eco vendidos en fresco o envasados, que, además, defienden una reducción de su impacto medioambiental. Ecológico, orgánico, ‘kilómetro cero’… son posibles ‘adjetivos’ aplicados a su potente gama de productos, planteada para permitir realizar la compra diaria en estos súper. Ramón Turró, 201. Tel. 93 277 872.
Este local está especializado en teína: una amplísima variedad de tés es lo que ofrece esta casa originaria de Suiza, instalada en el madrileño Barrio de Las Letras hace un par de años. Una ‘carta’ de más de 130 referencias es el resumen de un modelo de negocio que suma tienda de venta a granel, ‘tea bar’ y barra ‘take away’. Como tarjeta de presentación, una idea: su té procede de producción ecológica y se compra directamente en la plantación de origen, sin subastas, ni intermediarios. Se puede elegir entre orígenes como Sri Lanka, Taiwan, China, Japón, India o Kenia. Junto con los típicos verde, rojo, blanco o negro, se despachan mezclas y ‘blends’. Huertas, 22. Madrid. Tel. 91 504 79 97.
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