Dehesa de Luna Finca Reserva de Biodiversidad ha comenzado el año 2020 con una nueva imagen de Orígenes, el primer vino de la bodega que nació en 2005 y que, ahora con la añada 2017, estrena etiqueta para transmitir su fuerte unión con el campo, la viña y las aves que viven en este hábitat natural.
Dehesa de Luna Orígenes 2017 ha empezado el año con la actualización de su etiqueta que protagoniza la perdiz roja, símbolo de este vino, y una de las aves más apreciadas que nacen y viven en Finca Dehesa de Luna. La perdiz roja y Orígenes tienen mucho en común. Orígenes es el vino estandarte de la bodega y la perdiz roja es el ave esteparia más característica de la Finca.
Dehesa de Luna Orígenes 2017 se elabora con las variedades Tempranillo, Cabernet Sauvignon y Syrah – seleccionadas de dos de los cuatro viñedos creados en Finca Dehesa de Luna – El Viñazo y La Mata de la Culebra. Es un vino redondo y placentero que ha permanecido seis meses en barricas de 225 litros de roble francés. La añada 2017 es el resultado de años de trabajo en la viña y en la bodega para conseguir un vino que llegue al consumidor. Este es el primer vino que nació en la bodega y “es el resultado de una historia de muchas historias” como lo define José Luis Asenjo, director técnico de la bodega.
Dehesa de Luna Finca Reserva de Biodiversidad está habitada por fauna autóctona como águilas imperiales, avutardas y azores, entre otras especies. Por este motivo, cada etiqueta es un homenaje a la fauna que convive con el viñedo de Dehesa de Luna. Un ave, un vino. El vino Gran Luna está representado por el águila imperial, Dehesa de Luna Graciano tiene como protagonista al milano real y el vino blanco Garnacha Blanca va unido al halcón peregrino, el ave rapaz que destaca por su extrema rapidez.
Dehesa de Luna Finca Reserva de Biodiversidad cuenta con 3.000 hectáreas de terreno, de las que casi 1.000 se dedican a la agricultura, y las 2.000 hectáreas restantes están formadas por masas de monte mediterráneo y parcelas reforestadas con especies autóctonas. El viñedo cuenta con 64 hectáreas divididas en cuatro parcelas: El Viñazo, La Mata de la Culebra, La Cañada del Navajo y La Noria de Luna.